Son muchas las dudas que nos surgen cuando estamos en el mercado, a la hora de diferenciar la pescadilla o la merluza, y en este artículo, vamos a intentar dar luz sobre este tema.
Va a ser el tamaño y el peso lo que nos ayude con su clasificación, ya que morfológicamente son de la misma especie. En términos generales, tienen una presencia cilíndrica, con un cuerpo esbelto, alargado y fino. Poseen generosa cabeza siendo plana la parte superior. La mandíbula superior es algo más pequeña que la inferior y en ésta podemos encontrar numerosos dientes con forma de gancho y con una gran fortaleza a su vez. Su piel es de un gris azulado casi metálico que torna a blanco en la zona del vientre, aunque debemos decir que dependiendo de donde provenga podrá variar su color, ya que la argentina tiende más a tonos dorados y cabeza más pequeñas y si por ejemplo la que compremos proviniera de Nueva Zelanda lucirá unos tonos que tiendan más a marrones. Normalmente la pescadilla no va a superar los 1,5 kilos, siendo ya generosas, mientras que la merluza puede llegar desde ese peso hasta los 8 kilos. Con lo cual podemos entender que la merluza es la hermana mayor de la pescadilla. Son ambas pescado blanco y tienen una altísima calidad. Si bien la merluza es más sabrosa que la pescadilla. Sin embargo, es la pescadilla es considerada por expertos como la más jugosa de las dos. Viven en profundidades desde los 150 m a los 1000 m. Normalmente se alimenta y vive en el fondo, es voraz y agresiva y en ocasiones por la noche sube a cazar a la superficie. Su reproducción suele ser en invierno y primavera.
Su sabor es similar, pero no podemos decir lo mismo si comparamos las texturas o el precio. Respecto al precio, diremos que suele ser mayor el de la merluza porque normalmente es más escasa a la hora de llegar a la lonja. Eso sí, a la hora de pensar en su consumo para los más pequeños, será mejor adquirir merluza, ya que posee menos espinas que su hermana pequeña. Es sin duda el pescado más consumido en España, siendo muy superior la demanda a la producción, por lo que las importaciones se incrementan para abastecer nuestros mercados todo el año.
Es un alimento ideal para dietas hipocalóricas, o para personas que tienen que vigilar su colesterol. Con respecto a la merluza, diremos, que la pescadilla tiene todavía menos grasa, por lo que le su valor calórico será más bajo. Sin embargo, el aporte de proteínas es igual en ambos casos. Disminuyendo eso sí, el Omega 3, selenio, fósforo o potasio que nos va a proporcionar la pescadilla y aumentando, sin embargo, el contenido en yodo y en zinc, frente a la merluza.
Resumiendo, será el tamaño y el peso, lo único que diferencie a tan noble pescado. Y sin duda nos dará muchas opciones de cocinado, en nuestros hogares.